19 ene 2015

¿Es The Affair una serie digna de un Globo de Oro?

Una infidelidad y un interrogatorio policial. ¿Cómo puede evolucionar eso en uno de los estrenos más potentes del curso?

Reconozco que la sinopsis de The Affair me echó para atrás. ¿Dos personas casadas que engañan a sus parejas y viven una tórrida infidelidad? Perezón. ¿Hay en medio una investigación policial? Bueno, es que por sí sola sería muy aburrida. ¿La narran desde los dos puntos de vista? Eso ya hace que se diferencie un poco del resto. ¿Está nominada al Globo de Oro como mejor drama? Pues habrá que ver qué es, entonces. Y menos mal que se me dio por hacerlo. Aunque me haya enfadado con sus obviedades y con un par de capítulos aburridos. ¿Buscas un buen retrato de personajes, con buenos actores y una historia que, aunque no sea original, te dará la impresión de estar viendo algo nuevo? He aquí por qué creo que The Affair es, o no, una serie digna del Globo de Oro que se llevó el pasado domingo.

1. Por su estructura tan televisiva. Dividir la narración en dos partes con sus puntos de vista es poner en valor las posibilidades de la pequeña pantalla: exploración continuada de los personajes, dosificación de la historia... 2. ¿Por su trama? No, y es por momentos donde flaquea. Pero sí por el cómo la cuentan. Mi sensación tras haberla visto es la de “esta historia ya la he visto muchas veces, pero nunca así”. Cae en más tópicos de los que desearía, pero no da la impresión de ser un corta y pega. 3. La interpretación. Dejémoslo claro: Joshua Jackson es un accesorio, Maura Tierney también hasta su estallido final, pero Dominic West y Ruth Wilson se merecían su nominación y premio. Y tiro una lanza a favor de Mare Winningham (Anatomía De Grey). 4. La exploración psicológica. Cada versión es un paisaje pintado por dos artistas. Cada uno ve lo que percibe su mente y pinta aquello que más le interesa y, desde la distancia, lo que ha logrado sobrevivir al paso del tiempo. ¿Están ambos mintiendo u ofrecen su versión de la realidad? 5. La realidad. The Affair no es una historia de una infidelidad de culebrón donde hay comicidad y un fácil perdón. Aquí pesa y destruye todo lo que encuentra a su paso. El dolor solo trae más dolor y acaba repercutiendo en aquellos que creían estar a salvo