Abrimos un 1 de julio de 2013 con mucha, mucha ilusión y ganas de compartir con el mundo una particular visión del mundo televisivo. Casi 9 meses después, un 27 de marzo, alcanzamos las 20.000 páginas vistas en el blog. Para muchos este dato será mínimo, la gente como yo preferimos celebrarlo por mínimo que pueda resultar. Porque las cosas pequeñas son, al final, las que más feliz hacen a uno. Con motivo de haber alcanzado esta cifra, hago un repaso por las cinco entradas más vistas en el pequeño recorrido en que
El Megavisor lleva abierto.
¡Muchas, muchísimas gracias! ¿Te habías perdido alguna?
A finales de agosto hice un repaso por algunos de los
spin-offs que la historia se podía haber ahorrado, como
The Carrie Diaries,
Los Vigilantes de la Noche... Este tema también tuvo una
segunda entrega que, aunque no alcanzó las más de 1.000 visitas del primero, tampoco funcionó nada mal (de hecho, aunque las haya puesto las dos juntas, está en cuarto lugar).
El puesto de plata lo recibe una pequeña colección de
personajes televisivos que fueron interpretados por más de un actor, como la tía de
Will Smith,
Vivian Banks, en
El Príncipe de Bel Air o uno de los hijos de
Dinastía,
Steve Carrington.
Cuando
Kerry Washington se quedó embarazada,
Scandal bajó el número de capítulos de su temporada a 18. En esta entrada hice un listado de
las formas en que varias series lidiaron con los embarazos de sus protagonistas, desde los despidos (todos nos acordamos de la hermana de
Britney Spears) hasta compartir el embarazo con sus personajes (
Phoebe de
Friends, por ejemplo).
Los 90 son la década prodigiosa, y la televisión estos meses se está inundando de
reuniones de actores de algunas de las series clave de entonces, como
Sensación de Vivir o
Padres Forzosos. Nos encanta la nostalgia. Y
Tori Spelling más.
Y, para terminar, un repaso a algunas de las novias de
Ted Mosby en
Cómo Conocí a Vuestra Madre. Y, en concreto,
a las actrices famosas que compartieron amor o cama con el arquitecto. Desde
Busy Philips hasta
Katie Holmes. No tuvo buen ojo ni nada el muchacho.
