· The Wrong Mans tiene una trama que te sorprenderá para bien
· No te fíes del piloto de Hello Ladies: la cosa va mejorando en los siguientes capítulos
Esta temporada está siendo bastante decepcionante tanto en la categoría de dramas como de comedias, pero siempre hay alguna que otra que se salva de la quema. Estas son, a mi elección, las cinco
sitcoms a las que no hay que quitarle el ojo de encima.
Lo más curioso de esta serie de la
BBC Two es que, si le cuentas a cualquiera de qué va la serie, no pensará en una comedia. El caso: un hombre presencia un accidente de coche y se encuentra un teléfono en la carretera, lo coge y una voz le dice que tiene que entregarle dinero para salvar a su mujer. ¿Qué hace este? Se lo acaba contando al repartidor del correo de su oficina, y juntos intentarán buscar al dueño del teléfono para darle el mensaje. Todo esto con una torpeza increíble y obstáculos delirantes. Atentos a
Phil, está camino a convertirse en uno de los personajes más entrañables de los útimos tiempos. Si te estás preguntando qué tipo de comedia tiene este argumento, es una buena señal.
Confieso que cuando vi el piloto me dejó frío, muy frío. Y, sin embargo, de repente el segundo, tercer y cuarto capítulos subieron mi concepto sobre la serie como la espuma. El personaje de
Stuart Pritchard no es tan gracioso como otros de la factoría
Gervais/Merchant, pero tiene su encanto. Precisamente al no tener encanto: es tacaño, engreído e insufrible, pero claro, con su corazoncito. En la línea de la comedia inglesa, con sus personajes miserables y situaciones tan extrañas que hasta se podrían dar perfectamente en la vida real. No busca la risa por la risa, y eso se agradece.
¿Mi concepto de
Anna Faris como actriz? Con
Una Conejita En El Campus no era demasiado bueno, y eso que no la había visto nunca actuando. Además su creador es
Chuck Lorre, al que adoro por
The Big Bang Theory pero odio por
Dos Hombres Y Medio. El piloto no me dijo nada, pero le cogí el punto gracias a esa madre pasada de vueltas y a que, hay que reconocerlo,
Faris no está nada, nada mal. Los guiones están bien hilados y tienen sus mejores y sus peores momentos, pero por ahora pinta bien.
Siendo de los creadores de
Parks And Recreation prácticamente tenía el cielo ganado conmigo, pero
Brooklyn Nine-Nine es una serie muy distinta. Sigue ese patrón de personajes estrambóticos, de hecho repiten algún que otro estereotipo, pero difiere (y mucho) a la hora de abusar de los gags, a modo de flashbacks y de gracietas para un
Andy Samberg que es prácticamente el más prescindible del reparto, al contrario de lo que pueda parecer. No me he muerto de risa con ninguno de los capítulos, pero me saca bastantes sonrisas. ¡Ah! Atención a
Gina, la funcionaria, es de lo mejorcito que tiene, aunque casi todos los personajes han tenido su momento para lucirse.
Esta es más floja, sí. Bastante más que la mayoría de los nuevos estrenos, pero se salva de la quema porque te deja un buen sabor de boca, más de "qué cuqui" que de "¡me he muerto de risa viéndola!". Vamos, lo que viene siendo una serie de estas de relleno que no te molestan, pero que tampoco es imprescindible ver. Por las que no te disgustarás si las cancelan, vaya. Parece que en casi todas salvemos a un personaje, pero es que el niño chino se lo merece todo: sin él, la serie no sería la misma. ¡Que aprendan los demás niños actores de él, por favor!
