· Liev Schreiber es un reputado actor clásico con un Tony
· Los Sherlocks Benedict Cumberbatch y Jonny Lee Miller llevaron a Frankenstein a Londres

Dicen que la verdadera interpretación se hace en el teatro, sin segundas tomas y con el todopoderoso público delante, para darle más inri al asunto. Por eso muchas caras conocidas de la pequeña y la gran pantalla optan por dedicarse en algún momento al noble arte de la dramaturgia, como Neil Patrick Harris, que en 2014 llegará a Broadway con Hedwig And The Angry Inch. Pero no es cosa suya: aquí tenemos otros ejemplos, y seguro que alguno te sorprenderá.

Spacey se inició en el teatro en 1981. Empezó en un festival neoyorquino dedicado a
Shakespeare, y solo le llevó 1 año debutar en Broadway, aunque su carrera despuntó en 1986 con
Larga Jornada Hacia La Noche. Un lustro después,
Perdidos en Yonkers supuso su primer gran reconocimiento: el Tony a mejor actor. Aunque a partir de ahí llegaron sus grandles películas, siempre ha dejado tiempo para volver al escenario, y desde 2003 es el director artístico del
Old Vic, uno de los teatros más longevos de Londres.

Aunque siempre será
Miranda de
Sexo en Nueva York, y tampoco ha tenido grandes papeles que le quiten el sambenito,
Cynthia Nixon ya ha sido nominada 2 veces a los Tony por sus interpretaciones en Broadway. Una en 2006 por
Los Secretos Del Corazón, que se llevó al cine con
Nicole Kidman en su papel. En su segunda obra,
Wit, interpretó a una enferma de cáncer de ovario, lo que le dio su segunda nominación al codiciado premio (pero lo perdió contra
Nina Arianda).

¿Quién iba a pensar que el marido de
Naomi Watts es un respetado actor de teatro especializado en los clásicos?
Cimbelino,
Macbeth,
Enrique V o
Hamlet (todas de
Shakespeare) son solo algunos de sus grandes méritos, aunque el Tony se lo llevó en 2005 por
Glengarry Glen Rose, y estuvo nominado después en 2007 y 2010. en 2002 protagonizó
The Mercy Seat con
Sigourney Weaver. Aunque claro, todos lo recordaremos por las películas de superhéroes.

El pequeño
Harry Potter ya no era tan pequeño y, como no quería encasillarse, cambió dramáticamente (nunca mejor dicho) de rumbo profesional, así que aún siendo menor de edad se le dio por desnudarse en
Equus y acaparó portadas y portadas. En 2011 protagonizó un remake de
How to Succeed in Business Without Really Trying, en un papel que ya habían interpretado otros como
Matthew Broderick. Aunque no lo nominaron al Tony, el musical sí tuvo 9 nominaciones.

¿Qué hacen dos
Sherlock Holmes en su tiempo libre de rodajes? Pues protagonizar
Frankenstein. El protagonista de
Sherlock,
Benedict Cumberbatch, y el de
Elementary,
Jonny Lee Miller, llevaron a Londres un remake de la obra de
Mary Shelley en la que ambos actores se intercambiaban el papel de doctor o de monstruo según la función.
Benedict ya lleva años subiéndose al escenario, y de hecho ya se ha confirmado su participación en un nuevo
Hamlet para otoño de 2014.
